Conociendo el dejavú de mis sueños, que imponente ver la avalancha ante mis ojos. Si eres tu el encuentro con mis miedos por favor refleja en tus espejos la enferma composición de mis espacios invadidos por fantasmas, llévate entre las líneas de rugir las formas más escondidas de mis miedos.
Se fuente de purgas y cambios, encuéntrame acostada plácida y plena, esperándote, llenándome de fe en ti y confianza en mí …pero encuéntrame! porque te espero: eres mi alivio y mi consuelo.
